Tim Teeman/ The London Times La suite del hotel es tan blanca -una habitación vacía y la otra con una silla real y un sofá- que Meryl Streep considera brevemente mi sugerencia de que nos conduzcamos durante la próxima media hora como si actuáramos. Yo estaré de pie en el baño, ella puede sentarse en el trono mientras le disparo preguntas. O podríamos estar en el suelo las dos. La actriz se ríe. No se ve tan aterradora como la editora que interpretó en "El diablo se viste a la moda": Habla suavemente y tiene una risa aflautada.
Está exhausta, por eso después de hacer siete películas en dos años, decidió tomar un descanso. Eso sí, no lo hará sin antes realizar un ataque frontal contra los ejecutivos "hombres" de Hollywood por ignorar el éxito de las películas centradas en mujeres. Ella es la intérprete -de entre hombres y mujeres- más nominada de la historia de los Oscar (15 veces, con dos victorias a su haber). Su buena fama se la ha ganado por habitar completamente en sus papeles: desde la jefa de revistas de "El diablo se viste a la moda" a la madre del niño secuestrado, Lindy Chamberlain, en "Un grito en la oscuridad", pasando por su rol de una divorciada en "Kramer versus Kramer". También por sus roles en "La amante del teniente francés", y "Mamma Mia!". Y ahora último por el de Julia Child, la popular primera cocinera de la TV estadounidense.
La película sigue la historia real de una bloggera, Julie Powell, en su intento por cocinar las 524 recetas contenidas en el libro de Julia Child, "Dominar el arte de la cocina francesa en 365 días", junto con la historia paralela de la propia Julia Child en la década de 1950, cuando logra descubrir los secretos de la cocina que fueron el origen de su libro y la fundación de su carrera. El filme es pura diversión: cero violencia, casi siempre relaciones de pareja del todo felices y mucha mantequilla. Usted no podrá esperar para ver a Streep en pantalla, haciendo los gestos y maniobras de la Julia Child original, junto con Stanley Tucci como su esposo Paul.
COCINANDO SU PERSONAJE. La actriz todavía está tratando de perder el peso que ganó en "Julie & Julia". "La comida era divina. Creo que lo mejor que teníamos era Navarin de cordero. La Boeuf Bourguignon le siguió de cerca". ¿Mejoró esta experiencia la cocina de Streep? "El voto en casa -que incluye un marido de más de 30 años, Don Gummer, más cuatro hijos- es que sí. He aprendido a no apresurarme. Soy snob acerca del equipamiento, tengo mi cocina calibrada para corregir las llamas, tengo mis cuchillos afilados. Tuve que aprender a picar la cebolla. Un movimiento en falso y me hubiera rebanado un nudillo".
Dice la actriz que Julia Child fue una gran entretenedora. "Era divertida. En ese momento había obras de teatro y espectáculos, canto, baile y las noticias en la TV, pero no había programas de instrucción como éste. Ella siempre hacía cosas al azar, hacía los platos y decía (aquí pone la voz aguda de Child): 'Cuando pones frente a tus invitados un plato así, pues los haces felices. Y no hay nada como eso. Nada'. Era fácil estar en ese cuerpo, porque ella me recordada a mi madre, Mary".
Streep se sorprendió al descubrir que Julia Child no tuvo hijos. "Pero luego me enteré de que su hermana Dorothy sí había tenido hijos y me pregunté, ¿cómo sería eso?". Hay un momento clave en la película cuando Julia recibe la noticia del bebé que tendrá su hermana con gritos de alegría y también con tristeza. Streep dice: "Hay grandes expectativas en la vida de una mujer. Todo lo que el guión decía era, "soy muy feliz". Y pensé, "veamos qué tan feliz es Julia Child".
Meryl Streep suele hacer esto, dota a sus personajes con sus peculiaridades más allá de las instrucciones del guión. A veces no resulta, pero la mayoría de las veces los Meryl-ismos se sienten bien, robando escenas y añadiendo una capa más al personaje. Streep ha sido descrita recientemente como el sueño de un economista: cada proyecto en que se ha asociado ha sido un éxito de taquilla. "Es divertido", dice ella, acariciándose el mentón. "Me gustaría encontrar una forma de capitalizar eso. Creo que se trata de una serie de felices coincidencias y también creo que se debe a que hay más mujeres en la toma de decisiones de las películas. Hay más mujeres interesadas y menos miedo de hacer películas para mujeres".
Y esta es una tendencia bien a la moda. ¿Acaso Hollywood no ha despertado? "Siempre es una sorpresa para los estudios", dice Streep con mucha firmeza. "Porque los hombres que manejan los estudios viven sus propias fantasías. Es más difícil para un hombre saltar a la mente de un personaje femenino e imaginar 'esto podría estar pasándome a mí' que para una mujer imaginarse como un personaje masculino". Pero ¿importan realmente las ganancias que dejan las películas con mujeres a bordo? Dice Streep: "Los jefes de los estudios ven y entienden que hay un mercado femenino, pero todos responden al instinto de su niño interior y dicen: '¡Quiero ver otra de GI Joe!'".
Un reciente artículo especulaba que Streep podía ser nominada para otro Oscar este año; una fuente señala que la Academia ha observado una fuerte escasez de papeles femeninos. "Los roles para mujeres son más escasos", dice Streep. "El negocio del cine es una enorme máquina. Así es como funciona. Entonces ¿van a comprar 'GI Joe' o van a comprar 'Mamma Mia!'?". A "Mamma Mia!" le fue increíble en taquilla, le digo. "Los ejecutivos todavía no están tan seguros", comenta Streep. "Se necesita un buen vendedor. Este tipo de películas ha funcionado bien, sí, el público está ahí, pero no va en masa durante el primer fin de semana. Y eso es lo que ven primero".
Se ríe con tristeza sobre la posibilidad de otra nominación al Oscar. "Sigo pensando que debería obtener una buena respuesta para esa pregunta."
- Usted es la persona que tiene más nominaciones.
"Sí, ¡he perdido 13 veces!"
Streep no está de acuerdo en que sus papeles se han vuelto más livianitos. "El rol de 'El diablo se viste a la moda' no fue divertido de interpretar. Era como si tuviera mercurio en la boca. Yo no tengo una compañía de producción. No tengo a nadie dirigiendo mi carrera, sólo dependo de los guiones que me lleguen. Si me gustan los hago".
Así que, ¿qué sigue? "Siete películas en dos años y medio", susurra. "Nunca he trabajado tan duro, nunca". ¿Está ella agotada? "Sí. Me siento como que necesito un descanso. Ésta no es la parte más divertida", dice indicando la habitación de hotel. "La parte más divertida es hacer las películas, la perspectiva de vender el producto es la más difícil".
¿Ha considerado alguna vez la posibilidad de renunciar a la actuación? "No", dice ella. "Cuando cada uno de mis hijos nació, me tomé un año sabático. Es muy agradable tener tiempo para vivir, ver a otras personas".
Una vez ella me dijo que escuchaba a escondidas las conversaciones en restaurantes para escudriñar los acentos. "Sí, hago eso todo el tiempo, apenas puedo mantenerme atento a lo que me dice mi marido Don. Él me reta siempre: 'No hagas eso, es muy vergonzoso'". Meryl ríe con su travesura.
¿Cumplir 60 este año fue tan importante? "Para todos los demás lo fue", dice Streep, haciendo una mueca. "Es un gran número. Pero lo más importante que ocurrió no tuvo que ver con mi edad. Mi hija más joven (Luisa) se graduó de la preparatoria y se fue a la universidad. Siempre dije que cuando ella se fuera a la universidad, yo me iba a poner a hacer teatro, pero estoy tan agotada por el momento que la idea de hacer una obra de teatro me tira directo a una camilla".
El futuro Sus próximos trabajos incluyen poner su voz a la señora de Fox en la adaptación animada de Wes Anderson de la novela de Roald Dahl, "The Fantastic Mr. Fox". "Él es muy exigente", dice Streep sobre Anderson. "Él escucha todo, hasta la respiración de uno. Es casi como si estuviera catando y catando todo lo que escucha... Fue como trabajar con un compositor, como si estuviera escuchando música dentro de su cabeza". Más tarde estará en "It's complicated". El papel de Norma Desmond en el remake de "Sunset Boulevard" es todavía tema de conversación. "Ooh, yeeessss. Sería divertido. Pero mi amiga Glenn (Close) realmente se luce con su versión de Broadway, así que creo que ella tendrá la prioridad". "Meryl Streep es una buena cocinera" La directora y guionista de "Julie & Julia" es la mujer detrás de comedias como "Cuando Harry conoció a Sally" (guionista), "Tienes un e-mail" y "Sintonía de amor" (como directora). En esta apuesta con Meryl Streep habla del matrimonio y sus aristas más felices.
- ¿Que le inspiró a escribir esta película?
"Amé la idea de combinar estas dos historias. Ambas son sobre comida y matrimonios, dos de mis temas favoritos".
- ¿Discutió con Meryl Streep de comida en la filmación ? ¿Es ella una buena cocinera?
"Meryl es una buena cocinera pero ella no lo cree. Yo soy una buena cocinera aunque no tan buena como creo que soy".
- Meryl Streep se ve muy alta en la película. ¿Muchos problemas para lograr ese efecto?
"¿Estás bromeando? Absolutamente. Hicimos todos los trucos que se nos ocurrieron para conseguir que se viera tan alta como la verdadera Julia Child".
- Como mujer directora y guionista, ¿cuál es su punto de vista para hacer cine?
"Realmente no me veo a mí misma como una 'directora mujer'. Y creo que hablar de películas hechas por mujeres es una manera de etiquetar y trivializar el tema. Claramente no creo que tengas que ser mujer para hacer comedias románticas".
-Cuándo escribe en su casa ... ¿Qué tan seguido va a la cocina a buscar comida?
"Cerca de veinte veces al día".