Desconcierto en la derecha por resultados de la encuesta CEP

CURIOSO RESULTADO DE ENCUESTA CEP

Desconcierto en la derecha por resultados de la encuesta CEP
¿Fin a la estrategia de la corrupción?

Lo único que destacan al interior de la Alianza es que se logró “rayarle la pintura” al ex Presidente Lagos, quien bajó nueve puntos. Los demás resultados estuvieron por debajo de las expectativas.

La Nación

Por Paula Jarpa

“Los chilenos son muy especiales”, murmuraban en los pasillos de la Alianza por Chile al conocerse los resultados de la encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP), cuando se confirmó que la estrategia del sector en torno a la corrupción no había dado el resultado esperado. Algunos personeros, discutieron si debían aguardar un tiempo más, o si era mejor cambiar radicalmente de camino para tener alguna posibilidad de quitarle el poder a la Concertación.

El sondeo decepcionó a varios en la Alianza, porque mostró que, pese a los esfuerzos de la oposición, la figura de la Mandataria no fue afectada y subió seis puntos desde la medición de junio-julio, llegando al 52%.

Además, la identificación con el conglomerado oficialista se mantuvo en 32%, igual que en 2006, pese al caso Publicam y los quiebres que se han producido en el oficialismo a partir de las declaraciones del ex ministro Edgardo Boeninger, de Gonzalo Martner y de Jorge Schaulsohn. La Alianza, por su parte, sólo logró capitalizar tres puntos.

Pero nada de eso pasó. La estrategia de atacar a la Concertación por el lado de los casos de corrupción no tuvo los efectos en la ciudadanía. Sólo hubo una reacción ante los nombres más cuestionados, pero sin un trasvasije significativo hacia la oposición. Aunque le dio cuatro puntos más de aprobación a la Alianza (de 20 a 24%), esta cifra está lejos de ser una razón para festejar.

El único aspecto que provocó satisfacción en la oposición, y que coincidió con el diseño fijado cuando la dupla Larraín-Larraín asumió la dirección del conglomerado, fue el “rayado de pintura” que, a su juicio, lograron infligir a la figura del ex Presidente Ricardo Lagos. Éste bajó nueve puntos respecto de junio de 2006.

Duros golpes

Los dos aspectos que más golpearon a la derecha fueron el alza de la aprobación al Gobierno y la evaluación negativa que concitan las figuras del pacto.

Aunque el senador Pablo Longueira históricamente se ha manejado dentro de altos niveles de evaluación negativa, resultó paradójico que, pese a que en los últimos meses ha jugado un rol más conciliador, tuviera 39 puntos de rechazo, frente a los 37 de Girardi, el rostro de los presuntos casos de corrupción.

En menor grado, pero también generando incomodidad en los análisis, la otra presidenciable de la UDI, la alcaldesa Jacqueline van Rysselberghe, marcó 20 puntos negativos. También en este grupo estuvieron Joaquín Lavín, con 32 puntos, y el empresario RN Sebastián Piñera, con 23.

En el caso de este último, aunque subió un par de puntos en relación a junio, y se posicionó como la figura de la Alianza con un 45%, lo cierto es que sigue estando por detrás de otras seis figuras concertacionistas. Piñera dijo esta semana que la Alianza tenía que “jugar un rol más activo y constructivo en buscar soluciones a los problemas”, pero él mismo ha endurecido su posición frente al Gobierno, si se compara con su desempeño durante la administración de Ricardo Lagos, y se ha enrielado en la lógica del “no diálogo”, planteada especialmente desde la UDI.

Pesimistas

El pesimismo que se ciñó sobre la Alianza el viernes, a propósito de los escuálidos resultados, podría gatillar los primeros cambios en la estrategia de poner el acento en las faltas a la probidad. Aunque muchos en el sector estiman que “hay que dejarla correr”, admiten que sus efectos son lentos de medir y generan algo de desencanto.

Carlos Larraín, por ejemplo, terminó la semana con una confesión de brutal sinceridad, cuando declaró a Radio Cooperativa que no creía que el 2009 su conglomerado pudiera vencer al oficialismo en los comicios presidenciales.

“Si la Concertación vuelve a tener un Presidente el 2009 será por casualidad, no por la gestión política. Si el ciclo económico sigue como está, el Gobierno va a tener una cantidad de excedentes brutal, y eso, por supuesto, incide en el ánimo general. Sería una pena, casi una condena perpetua”, reconoció.

Tan cruda fue su sentencia que Hernán Larraín, desde la UDI, se vio obligado a corregirlo de inmediato: “Tengo la absoluta y plena convicción de que el próximo Presidente va a ser de la Alianza. Estamos generando una alternativa que da confianza, con buenos equipos, buena gente, buenas ideas. De manera que se abren enormes posibilidades para la Alianza”, afirmó.

Así las cosas, habrá que esperar un posible giro de parte de la oposición. Si bien no son pocos los que creen que a la estrategia de la corrupción hay que darle tiempo, también muchos estiman que se hace difícil y casi inviable sostenerla durante tres años más y que deben buscar nuevas líneas de acción. LND

Saludos cordiales
RODRIGO GONZALEZ FERNANDEZ
CONSULTAJURIDICACHILE.BLOGSPOT.COM
Renato Sánchez 3586 dep 10
Santiago, Chile