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Proyecto de acuerdo -presentado por cinco diputados UDI, uno RN y uno de cada partido de la Concertación- fue aprobado el martes pasado en la Cámara Baja.
Alerta ha despertado en el mundo privado el proyecto de acuerdo que aprobó el pasado martes la Cámara de Diputados y que busca incluir dentro de la calificación de "trabajos pesados" a las labores forestales. Y si bien, el acuerdo de la cámara baja no genera cambios en la ley, el temor que existe es que finalmente esta idea sea traspasada a un proyecto de ley que modifique la Ley 19.404.
Esta normativa señala que a quienes desarrollen cinco años de labores incluidas dentro de esta categoría se les anticipará en uno la jubilación, con un máximo de cinco años. Además, tal disminución podrá ser de dos años por cada cinco años trabajados en faenas realizadas en minas o fundiciones, con un tope de diez.
Por esta razón, tanto empleadores como trabajadores deben realizar mayores cotizaciones en las cuentas de capitalización individual.
Las empresas del sector fueron advertidas con anterioridad al 8 de agosto de este año -fecha en que se presentó el denominado proyecto 442- respecto a que un grupo de diputados estaba preparando un documento en esta dirección y desde entonces preparan una batería de argumentos para hacer frente al debate que vendrá.
"Estamos concientes que hay ciertas actividades de nuestro rubro que son pesadas, pero no podemos hablar de todas. Es por eso que nos interesa que se especifique con claridad de qué faenas están hablando", señala el vicepresidente de la Corporación Chilena de la Madera (Corma), Juan Eduardo Correa.
A su juicio, cuando se habla de trabajadores forestales se incluye a una extensa gama de actividades y "es por esta razón que nuestro Comité de Seguridad ha estado realizando un minucioso trabajo de modo de estar preparados con argumentos técnicos para la discusión, estableciendo las diferencias que caracterizan a nuestro sector".
Ahora bien, existen empresarios ligados a la dirigencia del sector que observan con mayor inquietud el tema, pues consideran que está siendo abordado desde una perspectiva política y no técnica.
Incluso advierten que en Chile se han ampliado en forma "indiscriminada" los trabajos pesados encareciendo los costos laborales y que el texto aprobado la semana pasada va en esa dirección, ya que no hace una calificación caso a caso, si no que sólo habla de las actividades forestales de una forma genérica.
Asimismo advierten que el proyecto 442 no considera los dos elementos claves para incluir a una labor dentro del concepto de "pesada", es decir, que entre en esta categoría por la naturaleza del trabajo, así como por el lugar y las condiciones donde se desarrolla la actividad.
Cabe señalar que en la legislación comparada ha relacionado "trabajo pesado" con aquel realizado en forma subterránea en la minería, aunque es posible percibir una tendencia a ampliar la idea en algunas legislaciones como la española, abarcando también actividades de naturaleza tóxica, peligrosa e insalubre.
En el caso de Chile, las últimas resoluciones de la Comisión Ergonómica Nacional -entidad encargada de determinar qué labores son pesadas- han incluido en esta categoría principalmente a las actividades mineras, pero también es posible distinguir algunos trabajos de altura y nocturnos, así como también relacionados con el área médica, alta mar y líneas aéreas.
Paños fríos
Pese a las inquietudes que hay en el mundo privado, el diputado Ivan Norambuena (UDI) -uno de los autores del proyecto de acuerdo, junto a cuatro pares de su tienda, un diputado RN y uno de cada partido de la Concertación- afirma que "no hay que asustarse".
Según el parlamentario la iniciativa nació de un inquietud de los trabajadores forestales, principalmente de Arauco y Ñuble, quienes plantearon la existencia de una serie de enfermedades producto de las labores en ese sector productivo. "Ahora bien lo que se firmó recientemente fue un proyecto de acuerdo y, por lo tanto, lo que hemos demostrado es que hay un tema que resolver, que hay faenas forestales que acarrean consecuencias, pero estamos abiertos a escuchar a todos los sectores para que den su opinión", aclara el parlamentario, aunque prevé una fuerte discusión. |
Silvana Celedón Porzio 
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